Por Gavin Beavers, Presentado por adidas
Desde el principio, mis padres me han dicho que haga lo que me haga feliz. Nunca ha habido ninguna presiĂłn sobre lo que querĂan que hiciera. Aunque, yo querĂa jugar el fĂştbol por mi papá. Cuando yo tenĂa ocho años y mi hermana tenĂa seis, tuvo un accidente de motocicleta en MĂ©xico. Honestamente, no deberĂa estar aquĂ, pero es un tipo impresionante y ha estado aquĂ para mĂ todos los dĂas durante este viaje. Por supuesto, ha habido momentos en que ha sido difĂcil. Mi mamá ha sido la roca de nuestra familia. Ella tambiĂ©n es impresionante. Mi papá está en una silla de ruedas ahora, pero siempre ha estado ahĂ y es una gran razĂłn por la que estoy en la posiciĂłn en la que estoy ahora. Cuando recibĂ mi primera llamada para el Equipo Nacional Juvenil de EE. UU., Ă©l y mi mamá lloraron al telĂ©fono porque era como si todo el trabajo que habĂamos realizado estuviera dando sus frutos. Ahora aquĂ estoy, acabo de regresar de mi último campamento con los U19, y fue bueno.Â
Verás, mi papá es un ex jugador Sub-20 de la SelecciĂłn Nacional Juvenil de EE. UU. Él sabe cĂłmo es esto. Para mĂ, lo que hace que un campamento internacional sea bueno es simplemente estar cerca de los muchachos y competir. Es un equipo divertido para jugar. Esta ventana jugamos Argentina y claro, quieres empezar ese partido. Estar en Argentina y ver su puesta a punto, es como un reino. Es un mundo completamente diferente, los seis campos de calidad de la Liga de Campeones, la cultura, fue increĂble. El campamento comenzĂł un poco dudoso, pero luego, lentamente, sentĂ que me volvĂa más estable y terminĂ© fuerte. Los entrenadores que me ayudaron allĂ tambiĂ©n fueron increĂbles. Jason Batty, quien solĂa ser el entrenador de porteros de los Utah Royals, estaba allĂ, y nuestro entrenador asistente es Jermaine Jones, a quien crecĂ viendo en la Copa del Mundo de 2014. Todo el grupo que tenemos aquĂ es familia. Comenzar ese partido contra Argentina fue probablemente lo más destacado. En general, fue una experiencia positiva. Luego, al regresar a Utah despuĂ©s de un campamento como ese, te sientes seguro. Â
Cuatro dĂas despuĂ©s, Pablo me llevĂł a un lado en las instalaciones de entrenamiento y me preguntĂł si estaba listo para ir ese fin de semana. Mi primera reacciĂłn fue solo emociĂłn, estaba zumbando. Para ser honesto, no sabĂa cuándo llegarĂa este momento, solo sabĂa que tenĂa que estar listo para cuando llegara. Pablo me dijo que entendĂa que el partido contra Columbus iba a ser un gran partido de mucha intensidad pero que confiaba en mĂ, solo necesitaba hacer lo que sĂ© hacer.
SalĂ de la habitaciĂłn e instantáneamente vi al entrenador de porteros de Real Monarchs, Mirza Harambasic. Me preguntĂł cuál era el plan para este fin de semana y le dije que estaba empezando y que estaba muy emocionado. Fue un momento especial, especialmente porque me trajo a la Academia y pensar en cuánto trabajo hemos realizado desde el primer dĂa y cuánto me ha enseñado, fue realmente increĂble. Sin Ă©l no estarĂa ni cerca del portero que soy hoy. Honestamente, todos los muchachos estaban sĂşper emocionados por mĂ, Blake Kelly, Fernando Delgado, todos. Luego, por supuesto, las primeras personas a las que les enviĂ© mensajes de texto fueron mis padres. El primer juego, por supuesto, todos estaban listos para estar en Columbus para verlo, incluso si los precios de los boletos de ida y vuelta eran un poco altos.
Esa noche, salà y cené con Bode Hidalgo y algunos de los muchachos, pero, sinceramente, mi mentalidad era más, "guau, estoy comenzando, necesito comenzar a asegurarme para este juego".
Estaba de vuelta y en la cama a las nueve.
Viajamos a Ohio al dĂa siguiente. Subir al aviĂłn no se sintiĂł diferente de lo normal, porque cuando estás en la lista, siempre piensas que existe la posibilidad de que tengas que entrar. Sin embargo, habĂa un poco más de confianza, solo conociĂ©ndote. eres el tipo que eligieron para el fin de semana, y que tienes que intentar y no solo hacerlo bien, sino tambiĂ©n mantener el puesto.
Llegamos tarde a Columbus, pero mi papá me dijo que necesitaba verme, asĂ que me reunĂ con Ă©l, mi mamá y mi novia en una hamburgueserĂa local, lo cual fue un momento agradable. Ya habĂa comido y era tarde, pero solo verlos ayuda a no intentar sobrecargar tu cabeza con todo lo que está pasando.
Luego, a la mañana siguiente, me desperté en el hotel y dije "bien, es hora de irse”.
Es gracioso, el dĂa del juego, este video apareciĂł en mi telĂ©fono en un juego de playoffs RSL vs Galaxy hace nueve años. Fue tan extraño que apareciera ese dĂa de todos los dĂas. Simplemente me hizo pensar, wow, pasĂ© de ver a Nick Rimando en la porterĂa de RSL y ahora, hoy, estoy en la porterĂa. Extraño.
Mientras me preparo a medida que avanza el dĂa, realmente no tengo supersticiones sobre el dĂa del juego, siento que solo soy yo tratando de recordar lo que hice la Ăşltima vez que juguĂ© bien. Desayunaba a esta hora oa esta hora? QuĂ© comĂ? Pequeñas cosas como esa.
Tuve grandes conversaciones con algunos de los veteranos del equipo. Damir me decĂa, cĂłmo no te vuelves a estrenar, que te vayas a divertir, que el equipo confĂe en mĂ y que haga lo que sĂ© hacer. TambiĂ©n tuve una conversaciĂłn con Zac MacMath, y fue de gran ayuda desde el principio hasta el final de todo esto, asegurándose de que obtuviera todo lo que necesitaba.
Ahora estoy en el estadio y estamos haciendo calentamientos y, en lugar de ser el servidor que calienta al titular, me sirven a mĂ. Fue entonces cuando comenzĂł a sentirse real. Veo que los fanáticos comienzan a llegar lentamente y, sinceramente, solo de pensarlo ahora me da escalofrĂos. A medida que entran más, estoy cada vez más emocionado.
Le enviĂ© un mensaje de texto a mi mamá antes del juego para decirme dĂłnde estaban sentados ella, mi papá y mi novia en el estadio, pero tuve que salir a calentar antes de que ella me respondiera. De vuelta en America First Field, o en Zions Bank, sĂ© exactamente dĂłnde están los asientos para sillas de ruedas, pero no pude encontrarlos para salvar mi alma. SĂ© que los puntos de la ADA normalmente están en la parte superior, pero no sirviĂł de nada. HabĂa tanta gente.
El ambiente en Columbus también es genial, el Crew tiene una gran base de fanáticos y, antes de que te des cuenta, todas estas personas están en las gradas y estás como "oh, mierda".
Sin embargo, eso aún no era todo, el verdadero momento de "oh, mierda" llegó durante el himno nacional. Definitivamente el himno nacional. Veo a Nagbe por Columbus, alguien a quien crecà viendo, e incluso estar con Damir, es simplemente surrealista. Luego termina y solo estás en la mentalidad de, está bien, vámonos.
En el momento, cuando piensas en cĂłmo eres el segundo portero más joven en comenzar un juego de la MLS, piensas que es genial, ya sabes, lo que sea. Pero ahora, mirando hacia atrás, estoy pensando, wow, hay muchos niños que nunca tienen esta oportunidad. Hay muchos tipos que firman acuerdos de la MLS que ni siquiera juegan. Yo sĂ© eso. Entonces, el hecho de que tengo que hacer mi debut ahora, sĂ© que es un gran logro, pero al final del dĂa, tambiĂ©n estoy tratando de divertirme y hacer lo mĂo. Si no me estoy divirtiendo, no vale la pena.
Mi plan de juego para este juego fue primero, por supuesto, hacer todo lo posible para ayudarnos a ganar, y luego, personalmente, tener un juego sólido y consistente, estar tranquilo con la pelota y hacer lo que sé hacer.
Luego sonó el silbato, y es como está bien, vámonos. Sin miedo.
Luego boom, en el minuto y treinta segundos, hago mi primera salvada.
Es genial mirar hacia atrás y pensar, ahà está el número uno, cumplà un sueño, sigamos adelante.
Siento que tocar la pelota temprano realmente me ayudó a calmarme, "vaya, está bien, vamos", sabes? Solo juguemos.
TambiĂ©n tuve a Zac y Nacho al margen, para ayudarme dándome pequeños detalles aquĂ y allá. Especialmente cuando tuvimos el descanso del Ramadán, eso me ayudĂł a resolver lo que tenĂa que hacer y lo que los muchachos no estaban escuchando de mĂ.
Durante el juego intentas hablar con los muchachos, pero no puedes. Como si estuviera gritando en el campo pero es fuerte, es muy fuerte, definitivamente es un poco diferente a tratar de comunicarme estando en casa.
Especialmente con la forma en que jugaban con cinco al frente, básicamente. Estás tratando de ordenar a todos, pero no pueden oĂrte.
Obviamente, las cosas no salieron como lo planeamos, creo que para mĂ, despuĂ©s de cada toque de pelota, ya sea positivo o negativo, solo pasa al siguiente. No me adelanto demasiado en el juego, solo uno tras otro. Sabe lo que quiero decir?
Lo más importante, no importa cuál sea la puntuación, no te rindas y sigue jugando como loco.
Creo que voy a agarrar esa primera pelota en el fondo de la red, estoy pensando, oh hombre, qué van a decir sus fanáticos? Luego lo agarro y pienso, "Está bien, no está muy mal, puedo lidiar con eso". En cualquier extremo durante 45 minutos, no importa quién esté detrás de ti durante un partido fuera de casa, estarán diciendo cosas todo el tiempo. Honestamente, es genial.
Hablé con Zac después del juego sobre simplemente asimilarlo todo, cómo fueron solo los primeros 90 minutos, hasta el siguiente. No hay nada que puedas hacer con los 90 minutos anteriores, independientemente del resultado. Asà que solo tienes que seguir adelante.
También hablé con Pablo, y él solo me recordaba que mantuviera la cabeza en alto y siguiera empujando. Todo está bien, vamos a resolverlo.
DespuĂ©s del juego, busco entre la multitud y todavĂa no puedo encontrar a mis padres. Obviamente, yo tambiĂ©n estoy frustrado, asĂ que estoy pensando, vayamos a las duchas y luego salgamos de aquĂ. Pero luego encuentro a mis padres y le doy a mi papá mi camiseta. Mis padres y mi novia, todos estaban tan emocionados.
Definitivamente fue un momento especial, porque quiero decir, se han sacrificado tanto como yo. Cuando pienso en este momento, pienso en ellos.
Definitivamente se reduce a eso. Salir, ir a la Academia y nunca se sabe, la cantidad de muchachos que terminan atravesando la Academia. Especialmente portero sabio, verdad? Porque solo hay un lugar.
Tienes tantos jugadores de campo que pueden jugar en diferentes posiciones, pero solo tengo un lugar para jugar y eso es todo. Asà que poder ver todos los años yendo a la Academia, añorando mi hogar y queriendo volver a casa, valió la pena.
Porque hubo momentos en los que me sentĂa, odio esto, no quiero hacer esto. Hablaba por telĂ©fono con mi madre durante horas, aunque siempre estaba dispuesta a hablar conmigo y me animaba a seguir adelante. Es muy difĂcil estar lejos de casa, y todos tus amigos están juntos en la escuela secundaria, van a fiestas y, sinceramente, esas cosas no podrĂan importarme menos, pero a veces me gustarĂa ver a mis amigos y luego irme a casa. y solo duermo en mi propia cama. Solo querĂa estar en casa con mi familia.
Me siento muy afortunado de haber encontrado un grupo de muchachos como Bode Hidalgo, Christian Nydegger y los muchachos con los que fui a cenar cuando descubrĂ que estaba comenzando, y los muchachos con los que puedo pasar el rato todos los dĂas. Honestamente, eso es lo que me salvĂł de no querer hacer esto nunca más. Pienso en ellos tambiĂ©n cuando pienso en poder hacer esto.
TambiĂ©n es un testimonio de los entrenadores de porteros que tenemos aquĂ en RSL, lo cual es irreal. El estándar de Blake, Fernando, Tomas, Zac y todos los demás es increĂblemente alto. Poder tener ese grupo para entrenar, es un testimonio para todos aquĂ.
Ahora, el enfoque es solo el prĂłximo juego. Siempre es el siguiente juego. Es seguir luchando y al mismo tiempo asegurarme de que me estoy divirtiendo, sabes a lo que me refiero?
A veces me quedo atrapado en las cosas del dĂa a dĂa, ya sabes, centrándome en con quiĂ©n jugaremos este fin de semana o entrenando, pero al final del dĂa, todos mis amigos acaban de terminar la escuela secundaria, Se supone que no debo estar aquĂ.
Solo necesito divertirme y recordar todo el trabajo que tĂş y tu familia hicieron. Al final del dĂa, estoy tan feliz de que esto es lo que puedo hacer.